6/1/08

Paraty, el paraíso en la Costa Verde


Paraty y la costa verde han sido todo un descubrimiento, el mejor destino de playa en el que jamás hayamos estado. La mezcla de sol, playa, arquitectura colonial y tranquilidad hacen de este pueblo un lugar perfecto para perderse unos días.

Desde el Rodoviario de Rio de Janeiro (estación de autobuses) cogimos un autobús de la compañía Costa Verde que nos llevó a lo largo de cuatro horas por la costa que une Rio con Santos hasta nuestro destino, Paraty.

En Paraty la vida se ralentiza, el ritmo es pausado, el stress se deja a un lado y sólo la paz y la tranquilidad se admiten en esta maravilla colonial. El pueblo es todo un ejemplo de conservación de la arquitectura colonial portuguesa. Caminar por sus calles adoquinadas, deleitarse con las casas que aún conservan el aroma del siglo XVIII y dejarse llevar por el ambiente bohemio hacen de Paraty un lugar fantástico.

Además, el entorno de la Costa Verde también ofrece maravillas como la playa de Trindade o las cachoeiras y las fazendas que rodean Paraty. Trindade merece una visita, desde el Rodoviario de Paraty parten autobuses cada hora y en unos treinta minutos te dejan en este pueblo.
También merece mucho la pena invertir una jornada en navegar la costa con alguno de los barcos que se encuentran en el muelle y dejarse caer en playas casi desérticas.

Al ser el último destino de nuestro viaje, el día de partida cogimos un autobús de la compañía Reunidas Paulistas que nos llevó en seis horas hasta Sao Paulo para volver a reunirnos con nuestra familia brasileña (Sergio, Aida, Serginho, Mari y Totó).

1 comentario:

Carlos y Cuca dijo...

hola pareja!!!

que pasada ...Paraty es un pueblo con mucho encanto ,ya nos lo habiais dicho ..pero ...teneis toda la razon...menuda playita,la foto del nene sobre la arena es genial!!,Soni..arriesgaste tu vida ehhh ,en la cascadita jejeje.

Bueno chicos ,nos encanta vuestra manera de contar los viajes...un 10..ojala ,si Dios quiere(y Juan por supuesto jejeje) podamos hacer uno juntos ...

un abrazo y nos vemos

Carlos y Cuca